Durante 2016 ha habido un repunte importante del comercio de lechones y cerdos vivos, tras el descenso registrado en 2015 como consecuencia de la introducción del etiquetado del origen, lo que impulsó a muchos procesadores a decantarse por los cerdos domésticos.
Alemania ha sido el mayor importador de cerdos vivos, con 15,4 millones de cabezas en 2016, un 7% más que en 2015. La mayoría de estos cerdos vivos fueron lechones destinados a ser cebados y sacrificados en Alemania.
El aumento de las importaciones fue clave para mantener la producción de carne de porcino en Alemania en 2016, teniendo en cuenta la reducción de los censos en diciembre de 2015 y en junio de 2016.
Las importaciones de cerdos vivos también crecieron en Polonia (+7% en 2016), especialmente de lechones, aunque en este caso también aumentaron los censos.
La cabaña de reproductoras en Polonia está expandiéndose debido a las más favorables condiciones de mercado. Asimismo, en Italia aumentaron las importaciones, fundamentalmente de lechones.
Dinamarca y Holanda han sido los principales proveedores de cerdos para el mercado de la UE. Dinamarca fue el principal abastecedor para Polonia (con un crecimiento de un 12% con respecto a 2015) y el segundo para Alemania (+2% de crecimiento interanual).
Las exportaciones de animales vivos de Dinamarca han crecido un 10% en 2016.Holanda se ha convertido en el principal abastecedor de Alemania, que ha importado un 11% mas que en 2015.
Más de la mitad fueron lechones destetados y el resto cerdos para sacrificio.
Holanda también es el tercer suministrador de cerdos de Polonia, si bien su envíos han descendido con respecto al año anterior. A su vez, Alemania también es un importante suministrador de cerdos de Polonia, según datos de AHDB.
Fuente: Agro digital