Los impactos de las tensiones comerciales entre los Estados Unidos y otros países se han sentido a través de los mercados durante más de un año. Los recientes desarrollos en las relaciones en las últimas semanas pueden cambiar los flujos comerciales en los próximos meses.
Resumen de eventos recientes:
- 20 de mayo de 2019: El gobierno mexicano anunció que eliminaría el arancel de importación del 20% sobre la carne de cerdo estadounidense con efecto inmediato. Esto es después de que México, Canadá y los Estados Unidos llegaron a un acuerdo sobre las tarifas de acero y aluminio.
- 31 de mayo de 2019: El presidente Trump propuso un arancel del 5% para todas las importaciones mexicanas en un intento por frenar la migración ilegal en la frontera entre Estados Unidos y México. Estas tarifas habrían entrado en vigor el 10 de junio y se elevarán al 25% el 1 de octubre.
- 8 de junio de 2019: Se anuncia que EE.UU. y México llegan a un acuerdo sobre inmigración, por lo que se suspendieron los planes para introducir aranceles a todas las importaciones mexicanas.
Las exportaciones estadounidenses de carne de cerdo se han reducido debido a disputas comerciales
Estados Unidos exportó 848.500 toneladas de carne de cerdo durante los primeros 4 meses de 2019, un 6% menos que en el mismo período del año pasado. Una caída en las exportaciones a México representó la mayor parte de esta disminución, los cuales cayeron un 19% en el año. Este fue un resultado directo de la introducción de tarifas. La carne de cerdo fresca y congelada ha compensado la mayor parte del descenso. Curiosamente, las exportaciones de despojos frescos en realidad han aumentado en un 20%, en 17.000 toneladas.
Con la reciente eliminación del arancel del 20% de la carne de cerdo de EE.UU. anunciada en mayo, es probable que veamos un aumento en los volúmenes de exportación en un futuro cercano. Será interesante ver si las exportaciones vuelven a los niveles pre-arancelarios.
Las exportaciones de México a los Estados Unidos han aumentado en casi un 25% en comparación con el año pasado. Esto se debió principalmente a los productos frescos y congelados. Sin embargo, esto solo representó el 5% del total de carne de cerdo importada por los Estados Unidos durante este período.
Las exportaciones estadounidenses a China también han disminuido debido a la introducción de aranceles, sin embargo, los volúmenes solo han bajado un 4%, lo cual es bastante poco, considerando que la carne de cerdo estadounidense ahora está sujeta a un arancel del 62%. Los envíos a Japón también han caído un 8% en el año, debido a una pérdida de participación de mercado como resultado del acuerdo comercial entre la UE y Japón.
Las exportaciones a Canadá, sin embargo, han aumentado este año en un 8%, hasta alcanzar las 86.800 toneladas. Nuevamente, esto se debe principalmente al aumento de los envíos de productos frescos y congelados, aunque no lo suficiente como para compensar la pérdida de exportaciones a otras naciones.
Las ganancias del mercado porcino de Estados Unidos
Los precios de los cerdos en los Estados Unidos ganaron un terreno a principios de este año. Los precios del cerdo magro en abril y mayo subieron un 45% y un 28% respectivamente en comparación con los niveles del año anterior. Mientras tanto, los precios de los futuros han sido volátiles, subiendo al principio por las noticias de la PPA en China y la esperanza de una fuerte demanda de exportaciones, y luego retrocediendo debido a la falta de progreso en las conversaciones comerciales entre ambos paises.
Los precios han sido respaldados por una mayor demanda debido a la expansión de la industria. Es probable que una mayor demanda sea también un reflejo del sentimiento positivo del mercado en relación con el potencial aumento de las exportaciones a México, tras la eliminación de los aranceles, y a China, por el déficit de carne de cerdo.
Si bien es posible que los Estados Unidos no puedan capitalizar por completo directamente la exportación a China, existe la oportunidad de satisfacer la demanda secundaria, ya que otros exportadores importantes dirigen con prioridad los suministros a China.
A nivel nacional, las medidas de bioseguridad contra la PPA han aumentado. En mayo, el Departamento de Agricultura de los EE.UU. anunció que comenzaría a realizar pruebas para detectar enfermedades en cerdos vivos y muertos. Esto es con la esperanza de que la enfermedad pueda ser contenida rápidamente si se detecta.
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