Ganaderos, productores y representantes políticos de municipios extremeños jamoneros participaron en el día de ayer en Cáceres en una jornada técnica denominada ‘Contra la despoblación, más jamón’, que pretende ensalzar la importancia del sector del porcino para fijar población en el mundo rural.
La consejera de Agricultura y Desarrollo Rural de la Junta de Extremadura, Begoña García, intervino en la inauguración de la jornada en la que ha destacado que el 31% de la producción de ibérico de España sale de Extremadura.
García ha recordado que esta actividad porcina fija mucha población al territorio y ha confiado en que, para la próxima montanera, la región cuente con un valor añadido que será el matadero de Zafra donde se recogerán todas las producciones para sacrificar a los cerdos en la región.
La jornada ha contado también con la presencia de Julio Tapiador, presidente del comité organizador, quien ha recordado que “el problema de la despoblación no es exclusivo y el patrón se repite en todo el mundo”, ya que según los últimos datos disponibles del Banco Mundial, un 55,7% de la humanidad vive en un entorno urbano, cuando en el año 2020 lo hacia el 46,6%.
Tapiador ha recordado que en nuestro país, 14 de las 50 provincias españolas se encuentran en situación crítica, con el 80% de sus municipios en grave peligro de extinción. Alrededor de 4.200 municipios tienen una gran falta de habitantes, y de ellos son ya 1.840 los pueblos que están en riesgo de despoblación irreversible.
“Sin embargo, los pueblos donde existen industrias de porcino mantienen población y por eso hemos lanzado esta iniciativa que vamos a extrapolar a otras regiones para poner en valor el sector jamonero y porcino”, ha subrayado, al tiempo que ha recordado que España produce unos 48 millones de piezas de jamón al año, por lo que el crecimiento del mercado tiene que venir por la exportación de jamones a terceros países como EE.UU. o Japón.
Tapiador ha señalado que el sector del jamón “está genial” en términos de consumo, ya que se vende todo lo que se produce, aunque otra cosa son los costes de producción, que también se han visto incrementados por el aumento de los precios de los cereales, la energía o los transportes.
Unos incrementos de coste que no siempre asume el mercado, por lo que para el mantenimiento de la industria del jamón es necesaria la internacionalización porque “la empresa vive de lo que vende”. En cuanto a la calidad de los productos, tanto en el cerdo blanco como ibérico, “es inmejorable”, ha resaltado, al tiempo que ha augurado que el futuro “es alentador”.
Antonio Prieto, presidente de la Asociación Interprofesional del Cerdo Ibérico (Asici), destacó el “compromiso firme” con la España despoblada. “No olvidemos que detrás de las cifras hay familias para las que sectores como el ibérico son una de las mejores vías para garantizar su proyecto de vida en sus pueblos”, ha recordado.