El restaurante cantonés Sun Ya, una marca de larga tradición en Shanghai, volvió a utilizar carne de cerdo ibérico como ingrediente para hacer los tradicionales pasteles de arroz glutinoso llamados “zongzi”.
El experimento del pasado año fue un éxito, y los bocadillos se convirtieron rápidamente en los nuevos favoritos de los habitantes de Shanghai. Lanzó 2 recetas nuevas, “súper grande con cerdo ibérico” y “súper grande con cerdo ibérico y yema salada”, cuyos precios pueden llegar a superar hasta tres o cuatro veces los “zongzi” tradicionales.
Cada año, en el quinto día del quinto mes del calendario lunar, China celebra el Festival del Bote del Dragón. Ese día, todos los hogares comen “zongzi” como parte de una costumbre que se remonta miles de años en el pasado.
Durante la celebración del festival este año, una vez más se volvieron a formar largas filas frente a la tienda principal del restaurante Sun Ya en la calle Nanjing, el famoso distrito comercial de Shanghai. Los clientes ignoraron el cálido clima para probar la cocina “mitad china y mitad occidental”.
Los “zongzi” de cerdo ibérico son los productos más vendidos del restaurante, que puede comercializar más de 5.000 piezas/día.
“Importamos docenas de toneladas de carne de cerdo de España y ahora solo quedan unas pocas decenas de kilogramos”, según Huang Renkang, chef ejecutivo del restaurante cantonés. “Se espera que se agoten durante el festival”.
Desde hace 2 años y tras muchos intentos, Huang descubrió que el cerdo ibérico tiene una textura fina y suave, resultando más fragante y delicioso que otro productos similares al envolverlo en los “zongzi”. Así que decidió “actualizar” el relleno y agregar ingredientes de estilo occidental a la cocina china.
El año pasado, los “zongzi” de cerdo ibérico se agotaron antes del Festival del Bote del Dragón, lo que hizo que muchos clientes se quedaran con el antojo. Para evitar la escasez de oferta, Sun Ya aumentó su volumen de compra este año en aproximadamente un 50%.
Ante el impacto de la COVID-19, Huang temía que los ingredientes importados desanimaran a los clientes. Sin embargo, a medida que se acercaba el festival, volvían a hacerse largas colas frente a la tienda todos los días.
“El año pasado me lo perdí y lo probaré este año”, comentó un cliente que se trasladó hasta el restaurante tomando el metro, para luego hacer una fila de casi una hora antes de adquirir sus “zongzi” de cerdo ibérico.
“Es un poco caro, pero pesa, tiene mucha carne. Nunca antes lo he probado, así que hoy lo voy a hacer”, explicó otro hombre de edad mediana mientras hacía cola frente a la caja.
“Este tipo de cerdo no es grasoso, y su sabor es muy fresco. Además, estos ‘zongzi’ son muy grandes, como dos o tres de los comunes, así que se pueden compartir con los familiares”, manifestó otro cliente.
Junto al animado mostrador de ventas había una larga mesa con hojas, arroz glutinoso y carne de cerdo ibérico. 2 cocineros uniformados empacaban “zongzi” en el lugar, atrayendo la atención del público.
En la actualidad, la afluencia de comensales de Sun Ya ha vuelto al 80% de su nivel normal y las ventas de comida para llevar se han duplicado. A principios de año, para resistir el impacto del nuevo coronavirus, el restaurante también estrenó las ventas en línea que resultaron bien recibidas por los clientes.
“Los beneficios de la expansión de las importaciones de China se han reflejado en la mejora e innovación que traen los alimentos importados a los alimentos tradicionales chinos para las fiestas tradicionales; el cerdo español es un buen ejemplo”, dijo Li Chunyang, subdirector de la división de cuarentena de animales y plantas de las aduanas de Shanghai.