La industria porcina en los Países Bajos está en proceso de contraerse en un 6,7%, lo que equivale a un total de 278 granjas porcinas.
La disminución es consecuencia de un intento de las autoridades neerlandesas de reducir la cantidad total de emisiones de olores y nitrógeno en el país. Inicialmente comenzó como un intento de reducir la presión de los olores cerca de pueblos y ciudades, la política se amplió en los últimos años para reducir también el total de emisiones de nitrógeno en el país, ya que se cree que un exceso de nitrógeno en el medio ambiente tiene un impacto sobre la biodiversidad. Para la denominada “Política de subvenciones a la cría de cerdos” (SRV), un programa voluntario, se puso a disposición un total de 450 millones de euros.
Primer pago
Los 278 criadores de cerdos ya han recibido un primer pago del 10% de la subvención por cese de actividad. Otros 163 ya han recibido un segundo pago del 70%, lo que significa que han cesado totalmente la actividad. Hasta mediados de junio ya habían cesado 21 granjas.
Con todo, el reglamento de subvenciones no ha demostrado ser el “éxito” que esperaba el Ministerio de Agricultura, Naturaleza y Calidad de los Alimentos (LNV) de los Países Bajos. Inicialmente 502 granjas expresaron interés, pero varias granjas retiraron su interés; cuyas razones aún no se saben. Para la póliza se dispuso de 450 millones de euros, hasta ahora quedan disponibles 170 millones de euros; por lo que esos fondos se aplicarán de forma diferente.
Productores de carne de cerdo de diversos orígenes
Lo que sí está claro, sin embargo, es que el grupo de granjas en suspensión tienen diversos antecedentes: granjas de produccción, granjas de cebado o granjas de ciclo cerrado. Los tamaños son variables y un buen número de granjas estaban funcionando correctamente. Obviamente, una parte de los productores que decidieron dejar de hacerlo simplemente no tenían sucesor de propiedad, por lo que esta oportunidad era demasiado buena como para no aprovecharla.
Como todos los tipos de granjas están en proceso de paralización, es probable que la situación actual del mercado no se movilice. Esa es la evaluación de la Organización de Productores de Cerdos de los Países Bajos (POV) que evalúa la situación de que el mercado en el país no se ha desbocado terriblemente y actualmente no hay necesidad de exportar lechones adicionales.
La mayoría de las granjas que cesan la actividad se encuentran en el sur del país, en las provincias de Limburgo y Brabante Septentrional.
A pesar de la política de subvenciones, se espera que la industria porcina de los Países Bajos pueda seguir desempeñando un papel relevante a nivel internacional. Según el POV, las empresas del sector están invirtiendo cada vez más en el exterior.
Poder de innovación para la industria
La política incluso podría impulsar el poder de innovación de los Países Bajos, afirmó René Veldman de Rabobank. Después de todo, las nuevas innovaciones impulsadas por esta política podrían dar lugar a que la industria porcina adopte grandes medidas para estar prácticamente libre de olores o emisiones, con un uso y una valoración sustancialmente mejores del estiércol. En términos de emisiones, medio ambiente y agricultura circular, los Países Bajos podrían desempeñar un importante papel en el escenario mundial.