Las últimas cifras de agosto muestran unos sacrificios porcinos europeos estables interanualmente, que alcanzan las 19,5 millones de cabezas.
Esto no fue suficiente para compensar los descensos de principios de año. Los sacrificios se redujeron un 1% en comparación con el período enero-agosto de 2019.
Los pesos de las canales en agosto fueron más altos que el año anterior, lo que refleja los retrasos en el sacrificio de cerdos en algunos países debido a problemas de personal por la Covid-19. Como resultado, la producción de carne de cerdo en agosto aumentó un 1%, hasta las 1,80 millones de toneladas.
Las tendencias de producción fueron bastane opuestas entre los estados miembros europeos durante el pasado mes de agosto. El crecimiento general fue impulsado por España y, en menor medida, Polonia, donde los volúmenes aumentaron un 11% y un 10% respectivamente. Mientras tanto, la producción en Alemania disminuyó un 4%. En términos de volumen, esta fue la mayor caída entre los estados miembros, lo que equivale a una disminución de 17.000 toneladas en el año. En Dinamarca también se registró un descenso interanual del 8%. Ambos países continúan informando desafíos productivos debido a los atrasos en los sacrificios de cerdos terminados, pero que no pueden procesarse. Otros estados miembros que registraron caídas notables fueron Italia (-6%), Portugal (-6%) y Bulgaria (-23%).
Los datos provisionales de septiembre muestran una tendencia creciente de la mayoría de los paises productores de cerdos clave. Los volúmenes daneses en particular parecen mucho más altos que los niveles del año pasado, según las cifras de Eurostat.