Tendencias de producción y consumo de carne de cerdo en Francia

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En 2023, el consumo per cápita de carne de cerdo en Francia alcanzó los 30,6 kg por habitante al año, consolidándose como la carne más consumida en el país. Superó así al consumo de carne de ave (29,5 kg per cápita) y al de carne de vacuno (21,3 kg per cápita).

Cabe destacar que el 75% de la carne de cerdo consumida en Francia se destina a embutidos y productos charcuteros. Sin embargo, durante 2023, el consumo de carne de cerdo experimentó un descenso del 3,7%, aunque en los primeros meses de 2024 se observa una ligera recuperación del 1,6%, impulsada principalmente por el sector de la restauración.

Francia es uno de los principales mercados europeos en el sector porcino, con una industria consolidada en producción, transformación y consumo de carne de cerdo. Sin embargo, en los últimos años ha experimentado una leve reducción en su capacidad productiva y un incremento en su dependencia de importaciones. A continuación, se detallan las principales tendencias según los datos más recientes.

Producción y autoabastecimiento de carne de porcino

La producción porcina en Francia ha seguido una tendencia decreciente en los últimos años. En 2023, la producción total de carne de cerdo fue de 2,065 millones de toneladas, lo que representa una caída del 6,31% en comparación con 2019, cuando se producían 2,204 millones de toneladas.

Esta disminución ha afectado directamente el nivel de autoabastecimiento, que en 2023 se situó en 108%, frente al 113,9% de 2020. A pesar de que Francia sigue produciendo más carne de la que consume, la tendencia muestra una paulatina reducción en su capacidad de producción. La utilización interior aparente (es decir, el consumo total considerando importaciones y descontando exportaciones) también ha bajado un 2,23% desde 2019, situándose en 1,911 millones de toneladas en 2023.

Estos datos reflejan un ajuste en el sector porcino francés, influenciado por factores como cambios en la demanda, regulaciones ambientales más estrictas, incremento de costos productivos y competencia con importaciones.

Evolución del censo y sacrificio de porcino

El censo porcino en Francia ha sufrido una importante disminución en los últimos años. En 2019, el número de cabezas de cerdo ascendía a 13,51 millones, mientras que en 2023 la cifra se redujo a 11,79 millones, lo que representa una caída del 12,73%.

Esta reducción en el censo ha tenido un impacto directo en el número de sacrificios. En 2019, se sacrificaron 23,54 millones de cerdos, mientras que en 2023 la cifra bajó a 21,84 millones (-7,22%). Sin embargo, el rendimiento por cerdo sacrificado se ha mantenido estable, con valores cercanos a 94,55kg por animal, lo que indica que la disminución en la producción no se debe a una menor eficiencia, sino a la reducción del número de animales disponibles.

Este descenso en el censo y sacrificios refleja la necesidad de ajustes en la industria porcina francesa para mantener la competitividad en el mercado, en un contexto de crecientes restricciones medioambientales y cambios en los hábitos de consumo.

COMERCIO EXTERIOR

Importaciones de carne y productos del porcino

Francia es un mercado clave para la importación de productos porcinos, y esta tendencia ha ido en aumento en los últimos años. En 2023, las importaciones alcanzaron 582.800tn, lo que supone un incremento del 9,32% en comparación con 2019.

A pesar de que el consumo total de carne de cerdo ha disminuido ligeramente, la proporción de importaciones sobre el consumo ha aumentado. En 2019, las importaciones representaban el 27,3% del consumo total, mientras que en 2023 esta cifra subió al 30,5%, reflejando una creciente dependencia de proveedores externos.

Entre los principales países exportadores a Francia destacan:

• España: con una participación del 45,03% del total importado, consolidándose como el principal proveedor.
• Alemania (16,09%), e Italia (9,91%), ocupan el 2º y 3º lugar respectivamente.
• Reino Unido, Bélgica, Dinamarca y los Países Bajos, también tienen una participación destacada en el mercado.

El aumento en la demanda de productos importados, especialmente de carnes procesadas y embutidos, abre oportunidades para los exportadores europeos, especialmente de productos con mayor valor agregado.

Exportaciones francesas de porcino

Por otro lado, Francia también es un exportador de carne de cerdo, aunque en los últimos años ha visto una leve disminución en sus ventas al exterior. En 2023, exportó 736.600tn, un 5,84% menos que en 2019.

A pesar de esta caída, Francia sigue exportando una cantidad significativa de su producción, con un 35,75% de la carne porcina producida destinada a la exportación. Este porcentaje ha disminuido ligeramente en comparación con 2021, cuando alcanzaba el 37,73%.

Los principales mercados de exportación de carne de cerdo francesa se encuentran en la Unión Europea, destacando países como España, Italia y Alemania, que absorben gran parte de los productos transformados franceses.

Tipología de productos importados

Las importaciones de carne y productos del porcino en Francia no solo se centran en carne fresca o congelada, sino que incluyen una variedad de productos procesados. En 2023, la distribución de las importaciones por categoría fue la siguiente:

• Carnes frescas, refrigeradas o congeladas: 46,4% del total.
• Despojos: 13,4%.
• Jamones y paletas curadas: 8,5%.
• Embutidos curados y cocidos: 14%.
• Jamones y paletas cocidos: 4,2%.
• Panceta salada, seca o ahumada: 1%.
• Preparaciones y conservas: 3,7%.

Este desglose muestra la importancia de los productos procesados dentro de las importaciones francesas, donde España tiene una posición destacada en el suministro de jamones curados, embutidos y carnes frescas.

Perspectivas del mercado porcino en Francia

Los datos analizados reflejan una tendencia clara en el mercado porcino francés:

• Reducción en la producción nacional y el autoabastecimiento, con una caída del censo y sacrificios.
• Aumento de las importaciones, con una creciente participación de productos de alto valor agregado.
• España como el principal proveedor de carne de cerdo a Francia, con una cuota del 45%.
• Mayor demanda de productos elaborados y embutidos, abriendo oportunidades para exportadores con capacidad de transformación.
• Estabilidad en el rendimiento por cerdo sacrificado, lo que indica que la reducción de producción no se debe a problemas de eficiencia, sino a una menor cantidad de animales en el censo.

El sector porcino en Francia sigue siendo fuerte, pero enfrenta desafíos como la competencia con importaciones, cambios en las regulaciones ambientales y tendencias de consumo más orientadas hacia productos procesados. Para los exportadores, especialmente españoles, este mercado sigue representando una gran oportunidad, especialmente en segmentos de carne fresca, embutidos y productos curados.

Francia continuará siendo un mercado clave en el comercio de porcino dentro de la UE, con un alto grado de tecnificación y una industria charcutera consolidada que impulsa la demanda de materia prima y productos transformados.