La Comisión Europea ha planteado adoptar un paquete de medidas a corto plazo para tratar de paliar la situación de crisis en la que se encuentran determinados sectores agrícolas y ganaderos por el COVID-19.
En este sentido, la propia Comisión propone la puesta en marcha de una medida de almacenamiento privado para distintos sectores ganaderos que están atravesando un momento complicado por el cierre del canal Horeca, que ha dejado sin salida los productos destinados a esta vía, y también por la especulación de los intermediarios y la distribución que están aprovechando esta crisis sanitaria para bajar los precios.
El almacenamiento privado, cuya aprobación se espera para esta semana, afectaría en un principio a los sectores del ovino, vacuno y caprino. La duración del almacenamiento sería de 3 a 5 meses para cada uno de estos sectores y el volumen estimado es de 25.000 t para el vacuno y 36.000 t para el ovino y caprino.
“Esta medida servirá para almacenar buena parte de la producción así como para desbloquear el mercado ante el cierre del canal Horeca. No es el sistema de intervención público que nosotros planteábamos, pero al menos contribuirá a mejorar la situación de mercado de los ganaderos”, mantienen desde UPA-UCE.
En este sentido, desde UPA-UCE Extremadura reclaman que el sector del porcino ibérico pueda acogerse al almacenamiento privado para mejorar la situación de mercado de las piezas frescas y superar la crisis del coronavirus, ya que ha registrado bajadas de precios del 50% con respecto al inicio de la crisis sanitaria. La organización agraria ya ha trasladado esta petición tanto a la administración regional como nacional para que lo traslade a su vez a la UE.
Caída de precios por el cierre del canal Horeca y la especulación
Debido a la actual pandemia de COVID-19 y a las amplias restricciones de movimiento establecidas en los Estados Miembros, el funcionamiento del sector de la hostelería y la restauración se ha paralizado a fin de proteger la salud humana, lo que ha generado trastornos económicos en el sector agrícola y ha dado lugar a dificultades financieras y problemas de liquidez para los agricultores.
Estas restricciones dan lugar a una fuerte caída de la demanda de determinados productos de consumo en diversos sectores agrícolas. Por consiguiente, este sector se enfrenta a una situación de perturbación del mercado debido a un gran desequilibrio entre la oferta y la demanda.
En consecuencia, ya se observa una tendencia a la baja sobre los precios de varios productos y, si no se adoptan medidas contra esa perturbación de mercado, se prevé que los precios de las materias primas de la UE sigan bajando con las repercusiones que esto conlleva para los agricultores y ganaderos. Por ello, desde UPA-UCE insisten en que se establezcan medidas de almacenamiento privado al sector del porcino para evitar así su discriminación en este aspecto.
ASAJA: Las medidas de apoyo al sector agrario adoptadas por Bruselas deben tener mayor ambición presupuestaria y ser complementadas por el Gobierno español
La medidas anunciadas por la Comisión Europea y que responden en buena parte a las peticiones de ASAJA, especialmente en lo que al almacenamiento privado se refiere, han sido bien acogidas por el sector, como un paso positivo en apoyo a los sectores afectados, si bien deben incrementar su dotación presupuestaria y deben subsanarse algunos olvidos. No obstante, estas medidas comunitarias deberían ser complementadas por otras de carácter nacional destinadas paliar las pérdidas que sufren los productores y a reorientar el consumo mientras dure el cierre del canal Horeca.
ASAJA ha acogido con satisfacción las medidas adoptadas por la Comisión Europea la pasada semana que tienen por objeto hacer frente a los efectos del COVID-19 en el sector agrario, especialmente en materia de activación del almacenamiento privado de productos lácteos (leche en polvo, mantequilla y queso) y productos cárnicos (vacuno, ovino y caprino). Para estas retiradas de productos del mercado se destinan 30 y 46 millones de euros respectivamente y el periodo de almacenamiento será de un mínimo de 2 a 3 meses hasta un máximo de 5 a 7 meses.
No obstante, detectamos en el documento de la Comisión algunos olvidos importantes. ASAJA echa en falta que no se incluya subsectores como el porcino ibérico y los lechones o que no se adopten medidas directas a la renta para los productores de flores y plantas ornamentales cuyos mercados se han visto cerrados como consecuencia de la declaración del Estado de Alarma. Igualmente, hemos demandado otra serie de medidas que no requieren gasto adicional alguno como es que se permita la entrada del ganado para pastar en los barbechos declarados Superficies de Interés Ecológico, con el fin de reducir costes de producción para los ganaderos y el uso de productos de protección de cultivos que permitan asegurar las producciones en este tipo de superficies, y la excepción generalizada del requisito de dar salida a un 60% de corderos y cabritos de las explotaciones para acceder al pago asociado para los ganaderos de ovino y caprino.
Además, la Comisión propone una nueva medida temporal solo para 2020 “con un propósito muy especifico y sin precedentes”, como explica el texto. Se trata de “una suma a tanto alzado” de 5.000€ para los agricultores y hasta 50.000€ para las PYMES”. ASAJA valora esta medida ya que puede suponer un alivio económico para aquellos productores que están pasando por dificultades económicas graves como consecuencia de la paralización de los mercados, si bien es necesario aumentar estos importes o complementarlos con fondos nacionales a través de ayudas de Estado o procedentes del Desarrollo Rural.
No obstante, con las medidas de almacenamiento privado adoptadas por Bruselas se reducirá la oferta de producción en el mercado, pero nada más. ASAJA considera esencial que, de forma complementaria, el Gobierno de España adopte otra serie de medidas destinadas a reequilibrar la oferta-demanda de productos agroalimentarios en el mercado. El cierre del canal Horeca ha afectado sobremanera a determinados sectores productivos, esencialmente las carnes más nobles o el vino, y es necesario arbitrar medidas que vayan destinadas a revertir esta situación.
Por otra parte, demandamos al Ministerio de Agricultura acciones concretas para involucrar a la Gran Distribución para que priorice en sus lineales la oferta de productos nacionales, al tiempo que se realizan gestiones para incrementar las exportaciones de nuestros animales. También son necesarias campañas de promoción que fomenten el consumo de la producción nacional, así como ejercer un mayor control y vigilancia de los contratos ganaderos para evitar incumplimientos en los mismos. Por último, se deben implementar medidas fiscales como aplazamiento del IVA o la exención de cuotas de la Seguridad Social que contribuyan a aliviar la carga impositiva para los empresarios agrarios más afectados por esta crisis.