La comunidad agroalimentaria aragonesa ha dado un paso decisivo en la defensa de la autenticidad de sus productos con la puesta en marcha de Verido, un proyecto pionero que une tradición e innovación tecnológica para blindar la calidad del Jamón de Teruel, la Paleta de Teruel, el Cerdo de Teruel, el Ternasco de Aragón y el Melocotón de Calanda frente al creciente riesgo del fraude alimentario en Internet.
Un problema en expansión
El fraude alimentario digital representa un desafío de gran magnitud en toda Europa. Se calcula que provoca pérdidas de alrededor de 30.000 millones de euros anuales a las empresas del sector y genera impactos negativos sobre la salud pública, al comercializar productos falsificados que pueden poner en riesgo a los consumidores. Además, deteriora la confianza del comprador y afecta directamente a pequeños productores y territorios rurales.
En regiones como Aragón, donde las Denominaciones de Origen Protegida (DOP) e Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP) forman parte esencial de la identidad cultural y económica, la amenaza del fraude es especialmente sensible.
Inteligencia artificial al servicio de la autenticidad
Verido propone una solución innovadora basada en inteligencia artificial (IA), capaz de monitorizar Internet en tiempo real para detectar usos indebidos de marcas de calidad diferenciada.
El sistema combina procesamiento de lenguaje natural, visión artificial y técnicas avanzadas de machine learning para identificar fraudes en textos e imágenes. Esta tecnología permite generar alertas tempranas y precisas, lo que facilitará una reacción rápida y eficaz ante cualquier intento de suplantación o comercialización ilegal.
Hasta ahora, la vigilancia del fraude digital se realizaba de manera manual y reactiva, lo que exigía gran esfuerzo y recursos. Según explicó Patricio Pérez, secretario del Consejo Regulador de la IGP Ternasco de Aragón “estamos ante un cambio de paradigma. Verido nos permitirá anticiparnos y actuar con mayor eficacia”.
Un impulso para el medio rural
Los primeros resultados del proyecto apuntan a una reducción de más del 70% en las horas de trabajo manual de supervisión. Además, Verido permitirá reforzar la confianza de los consumidores, proteger la reputación de los productos aragoneses y favorecer el desarrollo económico y social del medio rural.
Según señalan desde los Consejos Reguladores participantes “esta herramienta nos dota de capacidad de respuesta y de prevención, asegurando que los productos que llevan el nombre de Aragón mantengan su autenticidad y prestigio”.
Cooperación y proyección futura
El proyecto está coordinado por la Fundación de Innovación y Transferencia Agroalimentaria del Gobierno de Aragón (FITA) y cuenta con la participación de los Consejos Reguladores de los productos beneficiarios, además de la colaboración de Origen Aragón y la DOP Aceite del Bajo Aragón.
La iniciativa tiene vocación de futuro y carácter replicable: se prevé que Verido pueda extenderse a otras DOP e IGP tanto de Aragón como del resto de España, consolidando al territorio como referente nacional en innovación agroalimentaria y en la defensa de la autenticidad en la era digital.