La producción de cereales de otoño-invierno podría situarse este año en España en 17,7 millones de toneladas, de acuerdo con la primera estimación realizada por el Ministerio de Agricultura. Ese volumen supone un aumento del 24,4% respecto al obtenido el año pasado.
Todos los cereales contribuyen a ese incremento global, excepto el trigo duro, para el que estima un descenso del 10%, hasta las 812.900 toneladas. La caída se debe a una disminución tanto de la superficie dedicada a este cultivo como a los rendimientos. La estimación para los demás cereales es la siguiente: trigo blando, 6,3 millones de toneladas (+16,8% respecto a 2015); cebada, 8,6 millones (+35%); avena, 986.900 toneladas (+26,6%); centeno, 371.900 toneladas (+33,1%) y triticale, 546.800 toneladas (+24,3%).
La estimación del Ministerio es similar a la última presentada por ASAJA para los cereales de otoño-invierno (17,46 millones de toneladas) e inferior a las lanzadas el pasado mes de junio por Cooperativas Agro-alimentarias (20,31 millones) y la Asociación del Comercio de Cereales y Oleaginosas de España (21,08 millones).
La cosecha de grano de otoño-invierno será de 17,7 millones de toneladas, según el Magrama
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