Suscríbase a infoiberico.com y reciba las publicaciones al instante y gratuitamente en su correo electrónico
Loading

La montanera comienza con nervios, ilusión y un campo que renace

El inicio de la montanera constituye una fase determinante dentro del sistema de producción del cerdo ibérico de bellota. En este periodo, los animales acceden a la dehesa para completar el engorde final mediante el aprovechamiento de la bellota y de los recursos naturales disponibles, requisito indispensable para la obtención de productos certificados de máxima calidad. La jornada inicial implica la verificación de parámetros productivos, como el cumplimiento del peso mínimo establecido y la disponibilidad de bellota suficiente para sostener la campaña.

Aunque la temporada ha comenzado con cierto retraso y la producción de bellota presenta variaciones según la zona, las precipitaciones del año anterior han favorecido un nivel adecuado de fruto. En una finca de la provincia de Cáceres, más de 300 cerdos han iniciado ya su fase de montanera en una dehesa que pese a haber sido afectada parcialmente por incendios recientes, mantiene condiciones óptimas de pasto y arbolado. Las lluvias recientes han compensado parcialmente la caída anticipada de bellota madura causada por el viento, y la presencia de bellota verde en los árboles asegura su aporte de forma gradual durante los aproximadamente 50 días de mínimo que exige la normativa.

En esta finca prevén la salida de un 2º lote, compuesto por unos 220 animales de menor peso, que se incorporará progresivamente al sistema extensivo.

Durante la montanera, los cerdos realizan desplazamientos continuos en busca de alimento, con un consumo estimado de entre 7 y 10 kilogramos de bellota diarios, complementados con hierbas y raíces presentes en la dehesa. Su comportamiento alimentario incluye un proceso de selección natural por el cual descartan frutos dañados o de baja calidad sanitaria, manteniendo así una ingesta adecuada.

Los animales en esta finca cuentan con calificación A4, una de las categorías más exigentes dentro del sector ibérico, que requiere un manejo integral desde el nacimiento hasta su entrada en montanera, con más de 1 año de cuidados y control productivo. El seguimiento del desarrollo de la campaña permitirá evaluar la evolución del engorde, la disponibilidad de recursos y la adecuación del ecosistema durante todo el ciclo, aportando información relevante sobre la gestión tradicional de la dehesa y sobre el proceso de producción del cerdo ibérico de bellota.