Julio ha sido un mes de locos en el mercado de las materias primas. Las pantallas parecen ir por un lado, reaccionando con una volatilidad extremada a los pronósticos climatológicos para el maíz y la soja de EE.UU. y especulando primero con el mantenimiento o cierre del Corredor del Mar Negro y, después, cuando se confirmó su cierre, reaccionando cada día según Rusia bombardeaba o no instalaciones portuarias de Ucrania. Y por otro lado diferente parece ir el mercado nacional, donde es cierto que los precios han subido durante este mes, truncando la precedente tendencia bajista, pero no es menos cierto que la operativa real es mínima. Los bajos consumos ganaderos, especialmente en porcino, alargan los stocks del fabricante y permiten que no tenga que renovar compras. Además, con un mercado en el que los diferidos son bastante más baratos que los inmediatos, el fabricante va al día, esperando que pase el tiempo hasta que lleguen los precios más bajos de septiembre en adelante. Sin toneladas operadas, es todavía más difícil saber hasta qué punto son reales los precios más altos que hay ahora en las tablillas. Pero se presume que el empalme de campañas va a ser complicado, porque no dependerá tanto de la oferta (más que abundante en Brasil) como de la disponibilidad de la misma, es decir, de cuándo empiecen a llegar barcos de ese origen a puertos españoles. Aunque, de momento, los futuros parece que han reaccionado más a la escalada bélica que al cierre del Corredor. Y el comprador nacional se retira, presionando para que los inmediatos se acerquen a las cotizaciones más bajas de los diferidos, mientras el vendedor intenta defender una prima de disponibilidad para quien necesite un camión. Poco a poco, además, han empezado a aparecer también ofertas vendedoras de cebada y maíz de Francia aquí, hacia final de mes. Mientras, los agricultores han ido liquidando mientras los precios bajaban pero, en cuanto las pantallas han vuelto al verde, han guardado el poco género que se está cosechando (y con un avance de cosecha entorpecido por las lluvias de julio).

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.